TODO PASA POR LOS SENTIDOS

Somos CUERPO y tenemos que vivir con conciencia corporal. El cuerpo es una de las dimensiones de la persona que más nos ayuda al equilibrio de nuestro SER. Nuestro cuerpo nos informa, nos pone alerta, no orienta y hace vivir en el mundo. Porque todo lo que sucede en el exterior nos afecta en nuestro interior «Mi cuerpo me ama y por eso me alarma». Lo primero que tenemos que saber es que todo lo que sucede  a nuestro alrededor lo captamos a través de los 5 sentidos, que son señales extroceptivas que corresponden al medio externo y nos informan, por ese motivo es muy importante que estemos muy atentos a las señales que recibimos  y poderlos utilizar para percibir, conocer y relacionarnos mucho mejor en nuestro entorno. Nuestros sentidos nos hacen sensibles a lo que sucede en nuestro entorno e incluso en nuestra vida. Ser conscientes de nuestro ser corporal con la ayuda de los sentidos para descubrir todo lo que tenemos a nuestro alcance para realizarnos plenamente como personas. Usemos, disfrutemos, desarrollemos…nuestros sentidos ¡y a vivir!

Contamos con un sexto sentido «La intuición» pero ese será otro tema.

Contamos con 5 sentidos para emocionarnos, para tocar nuestro ser emocional porque son mensajes para el corazón

PROPUESTA DE TRABAJO: Déjate llevar por la imaginación y busca sensaciones que rodean todas las cosas.

  1. Si dejas a un lado el coco y te atreves a llenar de color, olor, sonido,…la vida, la recibirás de otra manera.
  • Si la amistad fuera un COLOR ¿Cuál sería?
  • Si la amistad fuera una MÚSICA ¿De qué tipo sería?
  • Si la amistad fuera un OLOR ¿A qué olería?
  • Si la amistad fuera un SABOR ¿A qué sabría?
  • Si pudieras TOCAR con los ojos cerrados la amistad ¿Qué tacto tendría?

Hacemos el ejercicio con otras emociones…traición, amor, primer beso, perdón, miedo,..

2. VISTA

Se trata de jugar a el «lazarillo y el ciego» por turnos y en parejas uno hace de guía (primero ayudando y después tan sólo con la voz) y el otro de ciego (Tapamos los ojos) Al terminar y en grupo todos llevan los ojos tapados y en fila con las manos en los hombros de la persona de delante somos guiados por el último, que es el único que ve (Instrucciones: golpe en los dos hombros caminamos hacia adelante, golpe hombro izquierdo hacia la izquierda y hombro derecho hacia la derecha.

Hacemos el juego y contestamos a las siguientes preguntas:

  1. ¿Por qué la vista es el sentido que más desarrollamos?
  2. ¿Qué ha sucedido durante el juego? Explica la experiencia.
  3. Saca alguna conclusión

3. Enlace para trabajar nuestro ser corporal

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Conectar con nuestro SER emocional

La vida es un suspiro nos dice en su poema García Márquez. Pues sí, así es. Por eso tenemos que ser consciente de nuestro SER diario y no solo del extraordinario. A lo largo de nuestra vida obligatoriamente hay que hacerse la pregunta: ¿Quién soy? La respuesta que demos a esta pregunta será el principio, el comienzo hacia nuestra realización personal y emocional. No es una pregunta nueva ,claro que no, pero lo que sí sabemos es que nunca es definitiva, porque jamás dejamos de crecer, cambiar y madurar como personas. El autoconocimiento lleva toda la vida y nunca dejamos de sorprendernos de lo que somos capaces de hacer, sentir, imaginar.

Todos tenemos un concepto de nosotros mismos que es el pasado, yo soy en el presente continuo, ¿ok? Desde nuestras primeras experiencias de vida, vamos forjando sentimientos respecto a las propias capacidades. Nuestra persona se asienta y se forma a través de lo que hacemos, sentimos y pensamos. En el contacto con los demás proyectamos nuestra autoimagen y los demás se forman una imagen acerca de nosotros influidos por la imagen que proyectamos, sin embargo, el modo como los demás nos ven también influyen en los conceptos que nos forjamos de nosotros mismos. Así se constituye un fenómeno de carácter circular.

En definitiva, yo NO SOY, VOY SIENDO… somos en el proceso de ir siendo…siempre expuestos al tiempo y en continuo cambio, acción, movimiento, transformación,…por eso es tan importante este ejercicio, porque de RE-CONOCES, es decir, vuelves a conocerte.

¿Qué es lo que considero en mi vida muy importante? Cuando somos capaces de parar y pensar en un instante qué es lo que realmente nos apasiona, nos llena, nos hacer SER y hacer mejor personas…entonces descubrimos cual es nuestro núcleo, nuestros valores, nuestro SER emocional que marca nuestra vida. Por eso es tan importante que revisemos nuestros valores, porque son ellos los que nos marcan la dirección de nuestro SER.

Para lograr una buena inteligencia emocional tenemos que reconocernos en lo que sentimos en nuestro día a día

PROPUESTA DE TRABAJO: Dos actividades para realizar personalmente y llevarlo al ámbito que deseemos. En mi caso, lo estoy llevando a cabo con 1º de Bachillerato (16 años)

  1. Completa esta lista para verte, reconocerte, etc.

–   La relación con mi cuerpo es:

–   Mi estado de salud es:

–   Los valores más importantes para mí son: (Defínelos con tus propias palabras)

–   Los acontecimientos qué más han marcado mi vida son:

–   Los aspectos de mi vida en los que aún no me siento libre son:

–   Las decisiones que tengo que tomar son:

–   Definiría mi carácter como:

–   Mis principales cualidades y defectos son:

–   Tengo miedo a:

–   Para mí Dios es:

–   Defino mi relación afectiva con los demás como:

–   Mi nivel de comunicación de mis opiniones y sentimientos es:

–   Mi forma de vivir mi sexualidad es:

–   Mi grado de implicación en los problemas que me rodean es:

–   Me siento llamado – a ejercer una profesión que tenga relación con:

2. Entra en el enlace para profundizar NUESTROS VALORES.

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¿CÓMO COMENZAR?

Comenzar siempre es un momento de motivación e ilusión porque las ganas por hacer posible nuestro proyecto nos impulsa a darnos por completo. Una de las herramientas emocionales para facilitar este camino que comenzamos y cada uno de los pasos que demos es aprender a parar, a respirar, a prepararnos antes de cada sesión, en este caso de clase o taller. Crear el ambiente, clima y técnica de relajación – concentración (Ver imágenes) con el alumnado o cualquier grupo, es necesario tener muy claro lo qué vamos a hacer y cómo lo vamos a hacer. Imprescindible practicarlo personalmente durante un tiempo considerable y tener muy interiorizada la técnica, creer en ella. La clase – grupo debe ver en nosotros esa seguridad y firmeza a la hora de transmitir lo que vamos a hacer y el por qué consideramos muy valiosa esta técnica para nuestra vida emocional. Comenzar con unos minutos de silencio y control corporal, sin nada más, ya habrá tiempo para ir profundizando, pero que sientan, noten que esos minutos les ayudan a estar mejor el resto de la sesión. Con el tiempo incorporar la respiración (lenta y profunda) y todas las demás técnica y herramientas que conozcas y/o consideres oportunas y necesarias. Recuerda: PRÁCTICA, PRÁCTICA, PRÁCTICA y además: PACIENCIA, PACIENCIA, PACIENCIA.

PROPUESTA DE TRABAJO: Encontramos esta actividad en los tres manuales del proyecto «emociones creativas» y en este blog no nos cansamos en recordarlo y reforzarlo. En el enlace encontrarás algunas pistas para llevarlo a tu vida y al aula.

PARAR

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RECOMENZAR

Tenemos que entender que rara vez comenzamos algo como si fuera una cosa totalmente desconocida, normalmente lo que hacemos es recomenzar porque partimos de una experiencia previa, de un camino recorrido, de un aprendizaje adquirido…y no siempre somos conscientes de esta realidad en nuestra vida, olvidando que contamos con recursos y habilidades que a lo largo del tiempo hemos ido alcanzando en diversas circunstancias y que lo único que necesitamos es ver cómo nos pueden servir en este momento o actividad concreto con la que comenzamos esta nueva etapa, el ciclo o el curso.

Si hay que recomenzar de nuevo, hagámoslo con fuerzas renovadas y muchas, muchas ganas de emprender el camino con entusiasmo y alegría. Lo importante es continuar creciendo, caminando, avanzando y compartiendo todo lo que somos y tenemos, porque al final lo único verdaderamente importante no es solamente lograr nuestros objetivos ,nuestras metas, es el disfrutar del camino, en lo emocional aún más.

Cuando emprendamos un nuevo curso, camino o etapa, aunque sea retomando el que ya habíamos comenzado, tenemos siempre hacer proyecto, propósito, objetivo…Recordemos que comenzar es siempre algo apasionante, una nueva aventura en la que tenemos que conocer y tener muy clara la meta que perseguimos porque nos marca el rumbo, la dirección, el sentido y el propósito.

Todo comienzo tiene una parte de ilusión y esperanza que nos motiva al logro de nuestros sueños

PROPUESTA DE TRABAJO: La metáfora del camino es muy potente para emprender algo nuevo, o comenzar una nueva etapa. Te propongo trabajar tres momentos que te facilitarán vivir con más serenidad este momento.

1º ¿De dónde parto? Piensa en cómo está tu vida, qué quieres cambiar y a dónde quieres llegar a partir de ahora. Al analizar lo que tienes y lo que quieres en el futuro, tendrás la idea de dónde te encuentras en tu vida. Define lo que quieres lograr y tener en tu vida. Deberás incluir todos los proyectos que tengas, las cosas materiales que quieras obtener, las relaciones personales que desees, etc. En este paso, tendrás que definir qué es lo más importante que quieres en la vida. Si deseas ganar cierta cantidad de dinero, anótalo en tu proyecto de vida. Si deseas un automóvil o un trabajo, anótalos y sé lo más descriptivo posible. Utiliza el diario de sentimientos y escribe toda esta reflexión. Te puede ayudar a ser concreto el siguiente cuadro de texto:

Lo que sé de mi en el pasado y en el presente: lo que me gusta y no me gusta, lo que sé hacer y lo que me cuesta más, lo que mejor se me da y lo que menos, las cosas que tengo como cualidades y los defectos, cuáles son mis valores,…
       


2º Ahora, para que tengas una visión muy clara de, partiendo de dónde estás, ver hacía dónde quieres ir responde a las preguntas:

¿Qué quiero lograr? META/OBJETIVO¿Cómo lo voy a lograr?
PROYECTO
¿Para qué lo quiero lograr? PROPÓSITO
   

3º Por último, haz una reflexión desde el sentido del camino que vas a comenzar o recomenzar:

  • ¿Es esta la meta que crees que te hará feliz?
  • ¿Cómo te gustaría verte dentro de cinco o diez años?
  • ¿Cómo cambiará tu vida si lo consigues?
  • ¿Qué hay detrás de esa meta? Es decir, ¿cuál es el propósito? La finalidad de tu plan de vida puede ser: obtener dinero, amor, libertad, tener más amigos o amigas, mejorar tu imagen personal, tener reconocimiento y fama.
  • ¿Crees de verdad que eso te hará feliz a largo plazo?
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LA VIDA ES UNA ELECCIÓN

Cuando somos optimistas no solo cambiamos la mirada focalizándonos en lo positivo y posible, si no que adquirimos ciertas conductas proactivas. Noa ponemos en acción para seguir adelante con más fuerza si es necesario, Se trata de ver lo bueno y positivo de todo en vez de quedarnos en lo que nos hace sufrir. Es entonces cuando nos daremos cuenta de la importancia de ser optimistas porque comprobaremos con alegría que, si miramos lo que nos hace mejores, lo que nos une y nos hace sentir bien, nos abrirá a una nueva perspectiva de lo que somos y tenemos mucho más activa y positiva. Debemos aprender a mirar desde lo positivo siempre. Es mirar lo que ya tenemos en el vaso, ni medio lleno ni medio vacío.

Seamos optimistas en la vida, siempre con actitud realista y sin dejar de buscar lo mejor; de lo contrario, aseguramos el fracaso o seremos unos ilusos. Cuando somos optimistas reforzamos la idea de que siempre se puede hacer algo, y lo hacemos con nuestros propios recursos y habilidades para manejar las situaciones. Y recuerda siempre lo más importante: que siempre tienes elección.

«Mas emociones creativas» (Prácticas 37)

Cuando vemos la vida como una elección sabremos cómo queremos vivirla y actuaremos en consecuencia

PROPUESTA DE TRABAJO: Se trata de algunos ejercicios, rutinas, acciones que tenemos que practicar a diario si pretendemos ser más optimistas y positivos frente a las circunstancias de la vida.

  1. Entrena el optimismo realista para que tu cerebro aprenda a ver oportunidades, retos, aprendizaje en la adversidad o situaciones complicadas. El dolor, el sufrimiento, la tristeza o la ira no desaparecen, además es importante sentirlo para gestionarlo.
  • Comienza todos los días con un pensamiento positivo. Qué oportunidades, qué retos, qué objetivos tengo para hoy.
  • Trabaja la PROACTIVIDAD, es decir, sé positivo en acción buscando soluciones, centrándonos en el paso a paso, anticiparnos a los acontecimientos…preparar y estar preparados. Ocúpate de las cosas que puedes cambiar, asume las que no puedas cambiar y aprende a diferenciar entre unas y otras. La proactividad implica autoconocimiento. Para lograr ser proactivo necesitas preocuparte también por mirar hacia ti mismo y conocer tus limitaciones y capacidades de las que dispones.
  • Crea hábitos – rutinas positivas. Sonríe, celebra, busca espacios y momentos para ti, escribe en el diario de sentimientos, pasea, contempla, descansa, baila…todos los días importan.
  • Rodéate de personas positivas que te transmitan alegría y ganas de vivir, personas que aporten a tu vida luz y esperanza, personas generosas con las que merece la pena estar.

2. Más en este ENLACE

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ES IMPORTANTE EVALUARSE

La evaluación es una de las partes más importantes de un proyecto de vida porque nos permite saber si estamos avanzando en nuestros propósitos. Se trata de marcar momentos para evaluarse: mensual, trimestral, anual…Los resultados que obtengamos son el mejor indicador de si lo estamos haciendo bien. Seamos flexibles y con la total capacidad para adaptarse y reaccionar para gestionar mejor los pasos que estamos dando o continuar aprendiendo de los errores y mejorando.
Un buen instrumento es el Diario de sentimientos que podemos utilizar para hacer revisión del día a día.

La evaluación tiene como propósito el saber en qué medida estamos cumpliendo con los objetivos que nos acercan a nuestras metas. Un proyecto puede ser muy bueno y fracasar por no tener un buen plan de evaluación en tiempo y forma. ¿Sabemos evaluar? Debe ser un instrumento sencillo que nos permita tener la mayor información objetiva y clara sobre lo que estamos realizando para llegar a nuestra meta, y una vez evaluado, mejorar, reforzar, consolidar, etc., las acciones que estamos realizando.

Toca revisar. La evaluación es la mejor forma de saber si vamos por el buen camino hacia nuestra meta.

PROPUESTA DE TRABAJO: Te propongo que dediques un buen momento a revisar y evaluar tu vida en los ámbitos que sea necesario o que necesites y planees propuestas de mejora para avanzar, mejorar y crecer… ese es el objetivo de la evaluación.

  1. UNA EVALUACIÓN CREATIVA
  • De forma divertida y creativa vas a hacer evaluación utilizando el símil del árbol.
  • Haz un dibujo de un árbol, como quieras, no te preocupes por el diseño. Es un simple ejercicio de creatividad. Ponle color.
  • En las raíces pones tus debilidades: lo que todavía necesitas conseguir, lo que no llegas a tener claro o no te funciona, etc.
  • En el tronco: tus fortalezas: lo que ya has logrado y tienes.
  • Por último, en los frutos: las consecuencias de estos logros en tu vida.

2. Prácticas del proyecto «emociones creativas»

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LO BELLO Y ESPECIAL DE LA VIDA

Desde el optimismo nos vemos a nosotros mismos, a los demás y al mundo de manera muy diferente. Se trata de mirar las cosas que ya tenemos, por muy pequeñas que sean, lo bello y especial de la vida y dejar de amargarnos por lo que no tenemos. Cuando somos optimistas no solo cambiamos la mirada focalizándonos en lo positivo y posible, sino que adquirimos ciertas conductas proactivas. Vemos lo bueno y positivo de todo en vez de lo que nos hace sufrir. Nos daremos cuenta de la importancia de ser optimistas cuando comprobemos con alegría que, si miramos lo que nos hace mejores, lo que nos une y nos hace sentir bien, nos abrirá a una nueva perspectiva de lo que somos y tenemos mucho más activa y positiva. Debemos aprender a mirar desde lo positivo siempre. Es mirar lo que ya tenemos en el vaso, ni medio lleno ni medio vacío.

Afrontar las dificultades de la vida con optimismo realista es siempre mucho mejor para nuestro estado emocional porque nos activa y mueve para resolver de manera natural esos momentos o cuestiones que, en alguna ocasión, se nos presentan. Cuando somos optimistas, no dejamos de sentir miedo, tristeza o rabia; simplemente tenemos que aprender a, entre otras cosas, saber que con actitud positiva aceptamos lo que nos sucede en la vida y nos enfrentamos a ello con trabajo y esfuerzo. Recordemos que solo el 25% del optimismo es genético, que el otro 75% se trabaja día a día buscando de manera objetiva lo bueno de todo y aprendiendo de cada una de las circunstancias de la vida, por muy complicadas que sean. Con todo lo que aprendamos debemos continuar con más herramientas, capacidades y habilidades.

Es una decisión personal vivir la vida y las circunstancias desde el optimismo realista o desde el victimismo pesimista

PROPUESTA DE TRABAJO: Recuperamos algunas de las actividades que ya hemos trabajado en este blog y, sobre todo, en los manuales del proyecto «Emociones Creativas» pulsando en el siguiente enlace

En positivo

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ATRÉVETE A EXPRESAR LO QUE SIENTES

No se trata de pensar menos y sentir más, no. De lo que se trata es de darle a nuestras emociones la importancia que se merecen porque son las que mueven nuestras vidas, las que nos impulsan o paralizan, las que nos dicen el qué está sucediéndonos. Conectar el corazón con nuestra mente, escuchar a nuestros sentimientos nos dará muchas pistas de por dónde y cómo seguir el camino hacia nuestra meta. Si separamos nuestro pensar de nuestro sentir, estamos abocados al fracaso en todo lo que hagamos y emprendamos. El corazón es esa voz interior que nos dice lo que es realmente importante vivir. La mente piensa el sentimiento, pero lo vivimos desde el corazón, lo sentimos desde nuestro ser emocionales.

Sentir supone reconocer nuestras emociones y admitir que todos somos sensibles y que experimentamos emociones a cada instante de nuestras vidas. Este reconocimiento es el primer paso para comprender nuestro estado emocional, tanto en nosotros mismos como en otra persona. Si nos pasamos la vida enfadados, veremos enfado en todas partes. Lo mismo puede decirse del resto de las emociones, incluidas las positivas.

Sentir sentimos, y mucho; pero expresarlo de manera correcta no siempre lo hacemos porque no es fácil. Saber expresar los sentimientos supone reconocerlos y reaccionar de acuerdo con ellos. Recordemos que muchas de las interpretaciones que hacemos sobre lo que sentimos o sienten otras personas son meras aproximaciones porque estamos muy influenciados por nuestras creencias y percepciones del momento.

Para sentir más hay que saber expresar lo que sentimos y reaccionar al respecto con naturalidad.

PROPUESTA DE TRABAJO: Se tratan de actividades de reconocimiento y expresión de las emociones, el primer paso para una buena y sana gestión emocional.

  1. Sigue estos sencillos pasos para gestionar esas emociones que te generan malestar, te bloquean o te impiden estar bien contigo, con los demás y con el mundo.
    • Reconoce e identifica de qué emoción o sentimiento se trata. ¿Qué sientes?¿Qué te hace pensar, sentir, vivir? Los síntomas los reconocemos en lo que hacemos o dejamos de hacer con esta emoción.
    • ¿Cómo te ves? ¿Te gustas? ¿Qué te dirías a ti mismo?
    • Ya conoces lo que te sucede ;pues acéptalo con naturalidad y pregúntate: ¿Qué puedes hacer? ¿Qué necesitas?
    • Ponte en marcha, cambia las acciones y cambiarás la emoción; cambia los pensamientos y cambiarás la emoción.
  2. En el móvil o en un espejo expresamos una emoción o sentimiento hasta estar convencido de que es la correcta, que es así como la expresamos y cómo la reconocemos en los demás. Si lo has hecho con el teléfono haz una foto y envíala a alguien para que te diga de que emoción se trata. Ponlo difícil y busca sentimientos como la frustración, la indiferencia, la ilusión, etc… si es en un espejo, entrena para más tarde poderlo hacer a alguien y que adivinen. En clase o en el grupo funcionan ambas opciones. Trabajar la comunicación no verbal es fundamental para reconocer, expresar y gestionar lo que sentimos y sienten los demás.
  3. Por último, crear un buen diccionario de sentimientos. Cuanto más vocabulario emocional manejemos, mucho mejor será nuestra comunicación emocional. La propuesta es que cada día o clase trabajemos un sentimiento, lo conozcamos y expresemos. Se puede hacer un cuadernito donde vamos anotando cada uno de estos sentimientos o un blog de notas virtual. Cada sentimiento lo trabajaremos siguiendo estos pasos:
    • RECONOCERLO en ti y en los demás
    • COMPRENDERLO ¿Por qué me siento así? ¿Qué ha podido provocar este sentimiento? ¿Qué ha pasado?
    • ETIQUETAR ponerle nombre, nombrar lo que siento exactamente, por eso es necesario un rico vocabulario emocional.
    • EXPRESAR si haces bien lo tres pasos anteriores serás capaz de dar una respuesta concreta a lo que sientes sin hacerte daño ni a los demás, con empatía y asertividad, simplemente expresamos lo que sentimos.
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LA ESCRITURA QUE NOS SANA

En la entrada anterior veíamos que es desde el presente donde podemos solucionar y vivir cada acontecimiento de nuestra vida, nuestro ser emocional. Ser conscientes de nuestro presente es vivir AHORA. Escribir lo que nos pasa, lo que sentimos y vivimos nos ayuda a comprendernos y a entender mejor nuestra vida en este momento concreto de nuestra vida. Consiste en contextualizar lo que sentimos y pensamos en este momento concreto, presente, con las circunstancias específicas y reales. Sabemos cuáles son las consecuencias que tienen en nuestro estado de ánimo y en nuestras acciones porque lo expresamos por escrito.

Desde hace unas décadas, el profesor de la Universidad de Texas, el psicólogo James W. Pennebaker, ha demostrado que los ejercicios de escritura emocional no solamente facilitan la tarea de mejorar nuestra salud psicológica, sino que, al poner por escrito lo que sentimos nos permite comenzar a, primero, ser conscientes de nuestro ser emocional y sus consecuencias en nuestra vida , segundo, poner en funcionamiento a nuestro cerebro para buscar un equilibrio emocional que nos permita ser y estar mejor.

El diario de sentimientos que ofrecemos en el proyecto «emociones creativas» es una manera creativa, expresiva, narrativa, artística y sencilla para crear un espacio en el que poder expresarnos con total libertad y desahogarnos si es necesario, celebrar nuestros éxitos y logros, evaluar nuestro camino hacia nuestros objetivos, tomar decisiones, buscar herramientas….

Libera tus emociones y sentimientos escribiendo
y expresando todo lo que sientes con creatividad.

«Más emociones creativas» (Prácticas 7)

PROPUESTA DE TRABAJO: El diario de sentimientos es quizá una de las herramientas de trabajo personal emocional con el que comienza el proyecto «emociones creativas» y que a lo largo de todo nuestro recorrido por las prácticas y actividades aparece como un recurso imprescindible. En la entrada anterior ya lo trabajamos y ahora es el momento de darle todo el significado y la importancia.

  1. Si ya trabajas con el diario de sentimientos, te sugiero que leas algo de lo que escribiste hace algunos meses y, desde el presente, describe quién eras y quién eres, qué has aprendido en estos meses y qué has hecho para crecer y avanzar.
  2. En este enlace tienes, de manera muy pedagógica, las instrucciones para comenzar a utilizar en tu vida y para tu vida el diario de sentimientos
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VIVIR EL AQUÍ Y EL AHORA

Nos pasamos la vida mirando hacia atrás o preocupados por el futuro y se nos olvida que lo realmente importante es vivir consciente e intensamente el PRESENTE.

Vivir el presente es ser conscientes de lo que ocurre aquí y ahora. Necesitamos descubrir lo que nos impide ser y estar en el presente de nuestra vida. No se trata solamente de estar atentos, sino de buscar la manera de no perdernos en el tiempo y, por consiguiente, perdernos la vida. Lo principal es darse cuenta que nuestra mente está siempre en «marcha» ocupada en un sinfín pensamientos voluntarios o involuntarios que nos llenan de ruido: recuerdos, experiencias, preocupaciones, anhelos, etc. Tenemos que trabajar mucho para acallar nuestra mente y centrarnos en lo realmente importante y necesario para nuestra vida, prestar atención a lo que nos sucede dentro y fuera de nuestro ser con verdadera curiosidad e interés. Este es el primer y más importante paso para vivir en presente, CALLAR. Requiere mucha práctica y paciencia, pero lograremos vivir momento a momento, situación a situación y, por lo tanto, resolveremos y gestionaremos, gozaremos y disfrutaremos de las cosas en el instante en el que suceden, no ayer ni mañana.

Ser conscientes, es ser en el presente, se trata de una herramienta de la inteligencia emocional que nos da la oportunidad de entender mejor la realidad y de aprender a eliminar lo que nos impide ser felices. No evitaremos los problemas y circunstancias adversas, pero seremos capaces de vivirlas con otra actitud, porque no se trata de ser en presente solamente cuando estamos bien, sino que, desde este presente, afrontar la vida y los retos de cada día con consciencia, tranquilidad y entendimiento. Seremos más competentes emocionales y mejores personas.

Vivir en presente es hacerlo desde nuevas experiencias, cambiando nuestra manera de ser si es necesario. Es en presente cuando nos descubrimos y reinventamos, crecemos y maduramos, tomamos las decisiones correctas y rectificamos nuestros errores. A veces lo que descubrimos no nos gusta y por ese motivo preferimos vivir en un pasado «ideal» o un futuro inexistente.

Tenemos que ser capaces de centrar toda nuestra atención en el presente continuo de nuestra día a día mirando el pasado como el lugar en el que aprendimos y logramos mucho de lo que hoy somos y abiertos al futuro desde nuestra realidad presente.

En definitiva, si queremos vivir en presente hay que aceptar que las circunstancias no las vamos a poder cambiar, pero si logramos esa consciencia del momento, podremos gestionar el pensamiento, el sentimiento y, lo más importante, la actitud con la que afrontarlas. El presente es continuo y comienza ahora mismo.

Es ahora cuando podemos elegir cómo sentirnos, cómo pensar, y cómo actuar.

PROPUESTA DE TRABAJO:

  1. Lo principal y más urgente para aprender a vivir en PRESENTE y en el PRESENTE es tomar consciencia de nuestra vida. Buscar momentos para parar, respirar y observarnos. Un ejercicio de conciencia plena en lo que siento, pienso, hago y vivo. La herramienta del diario de sentimientos es una muy buena aliada para trabajar la autoconsciencia. Busca un lugar tranquilo, ponte en una postura que facilite el ejercicio de relajación y concentración, gestiona tu forma de respirar haciéndola cada vez más lenta y profunda…obsérvate, siéntete… y después escribe.
  2. Vive conscientemente cada instante, cada momento. No dejes que el PRESENTE se escape, valora y experimenta en presente, porque lo esencial da la vida se encuentra en este momento único e irrepetible. Si la experiencia es negativa o difícil busca la forma de superarlo reconociendo y gestionando cada sentimiento, cada pensamiento y cada acción para lograr superar esta circunstancia. Si, por el contrario, la experiencia es positiva, disfruta al máximo y goza, vive intensamente. El truco está en saborear cada instante para aprender a ser más y mejores personas y, ante todo, disfrutar más de la vida.
  3. En presente continuo
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