¿CÓMO INICIAR EL CURSO CON ENTUSIASMO Y MOTIVACIÓN?

El inicio de un nuevo curso es una emocionante oportunidad para crecer y aprender. A pesar de que el camino pueda presentarse como un desafío abrumador, es fundamental no ceder al miedo y abordar los retos con entusiasmo y motivación, siguiendo algunos pasos clave.

Es importante tener en cuenta que no estamos empezando desde cero, sino que ya hemos progresado bastante. Solo debemos recuperar los recursos, experiencias, conocimientos, etc. que ya tenemos y reflexionar sobre nuestra vida en este momento concreto.

Empezar desde lo que somos, lo que tenemos, lo que sabemos y lo que experimentamos. Analizar nuestro estado personal y emocional actual. Ser conscientes de cómo vamos a iniciar este nuevo curso y con qué recursos contamos. Este ejercicio es vital, ya que nos permite partir desde la verdad e identificar lo que tenemos y necesitamos.

Después de analizar detenidamente nuestra situación actual, es el momento de visualizar nuestros objetivos. Soñar, desear, imaginar… sin límites. La magnitud del sueño no importa, lo fundamental querer mejorar, crecer, transformarse y aprender.

¿Cómo hacer realidad estos sueños? Convirtiéndolos en metas y objetivos. Establecer metas a corto, medio y largo plazo nos acercará cada vez más a nuestras metas. Es fundamental que estas metas sean realistas, alcanzables y factibles.

Muy importante, crear un plan de acción sólido. Esto implica establecer plazos, identificar los recursos necesarios, anticipar posibles obstáculos y solicitar ayuda cuando sea necesario. Reconocer que el camino hacia nuestras metas será para todo el curso, requiriendo esfuerzo y dedicación. Por lo tanto, necesitamos establecer una rutina con horarios fijos para dormir, comer y trabajar, pero también para descansar, divertirnos, relajarnos y tomarnos un respiro, esto es crucial. Adoptar buenos hábitos y rutinas desde el principio del curso es importantísimo.

Planificar cuándo realizar cada rutina y tarea para aprender a priorizar y asumir la responsabilidad de nuestra vida. Puede que esta sea uno de las cosas que más trabajo nos cuesta, la gestión del tiempo.

Mantener siempre el enfoque en nuestro proyecto de curso puede ser complicado cuando la rutina y el cansancio nos absorben. Por eso, es fundamental mantener siempre la vista en las metas que queremos alcanzar. Es bastante útil programar una revisión mensual de nuestro plan de acción y evaluar el progreso para visualizar los logros de cada objetivo.

Convertir nuestras acciones en hábitos diarios requiere mucho esfuerzo para asegurar su permanencia en el tiempo. Buscar motivación en el proceso, celebrar logros y avances, aprender de errores y disfrutar de cada momento son clave. Asimismo, es recomendable y beneficioso romper la rutina de vez en cuando.

¡Comenzamos una nueva travesía emocionante! Y si tienes la oportunidad de hacer un curso de educación emocional, ¡mejor aún! Te equipará con las herramientas para abordarla con la chispa y la energía que tanto echamos de menos.

¡Este curso será una gran aventura!

PROPUESTA DE TRABAJO: Te propongo una actividad que te ayude a construir tu plan para este curso que comienza.

  1. Empieza anotando en tu diario de sentimientos las cosas que ya no tolerarás en este curso, junto con lo que deseas mejorar, alcanzar y superar. A partir de ahí, crea un plan para encaminarte hacia tus metas, utilizando la motivación como tu fuente de energía. Aquí te presentamos algunas pautas para mantener tu nivel de energía en todo momento elevado:
  2. Es fundamental tener claridad constante sobre qué es prioritario, de lo contrario, te resultará difícil saber por dónde empezar.
  3. Establece plazos para cada paso en tu camino hacia el éxito; sin fechas específicas, el proyecto se desvanece.
  4. Define cada meta de la forma más precisa posible.
  5. Transforma tus deseos en objetivos concretos y enfocados en su consecución. Deja a un lado lo meramente mental y pasa a la acción, ya que ver los resultados alimentará tu motivación.
  6. Evalúa y revisa tu progreso con un sólido plan de evaluación, tanto a nivel personal como profesional. Hazte preguntas como: ¿Cómo voy? ¿Por dónde voy? ¿Qué necesito? ¿Cómo me siento? ¿Qué me falta? Y responde a la pregunta: ¿Qué puedo hacer?
  7. Celebra cada éxito y logro alcanzado

Para seguir trabajando ENLACE

RECOMENZAR

Tenemos que entender que rara vez comenzamos algo como si fuera una cosa totalmente desconocida, normalmente lo que hacemos es recomenzar porque partimos de una experiencia previa, de un camino recorrido, de un aprendizaje adquirido…y no siempre somos conscientes de esta realidad en nuestra vida, olvidando que contamos con recursos y habilidades que a lo largo del tiempo hemos ido alcanzando en diversas circunstancias y que lo único que necesitamos es ver cómo nos pueden servir en este momento o actividad concreto con la que comenzamos esta nueva etapa, el ciclo o el curso.

Si hay que recomenzar de nuevo, hagámoslo con fuerzas renovadas y muchas, muchas ganas de emprender el camino con entusiasmo y alegría. Lo importante es continuar creciendo, caminando, avanzando y compartiendo todo lo que somos y tenemos, porque al final lo único verdaderamente importante no es solamente lograr nuestros objetivos ,nuestras metas, es el disfrutar del camino, en lo emocional aún más.

Cuando emprendamos un nuevo curso, camino o etapa, aunque sea retomando el que ya habíamos comenzado, tenemos siempre hacer proyecto, propósito, objetivo…Recordemos que comenzar es siempre algo apasionante, una nueva aventura en la que tenemos que conocer y tener muy clara la meta que perseguimos porque nos marca el rumbo, la dirección, el sentido y el propósito.

Todo comienzo tiene una parte de ilusión y esperanza que nos motiva al logro de nuestros sueños

PROPUESTA DE TRABAJO: La metáfora del camino es muy potente para emprender algo nuevo, o comenzar una nueva etapa. Te propongo trabajar tres momentos que te facilitarán vivir con más serenidad este momento.

1º ¿De dónde parto? Piensa en cómo está tu vida, qué quieres cambiar y a dónde quieres llegar a partir de ahora. Al analizar lo que tienes y lo que quieres en el futuro, tendrás la idea de dónde te encuentras en tu vida. Define lo que quieres lograr y tener en tu vida. Deberás incluir todos los proyectos que tengas, las cosas materiales que quieras obtener, las relaciones personales que desees, etc. En este paso, tendrás que definir qué es lo más importante que quieres en la vida. Si deseas ganar cierta cantidad de dinero, anótalo en tu proyecto de vida. Si deseas un automóvil o un trabajo, anótalos y sé lo más descriptivo posible. Utiliza el diario de sentimientos y escribe toda esta reflexión. Te puede ayudar a ser concreto el siguiente cuadro de texto:

Lo que sé de mi en el pasado y en el presente: lo que me gusta y no me gusta, lo que sé hacer y lo que me cuesta más, lo que mejor se me da y lo que menos, las cosas que tengo como cualidades y los defectos, cuáles son mis valores,…
       


2º Ahora, para que tengas una visión muy clara de, partiendo de dónde estás, ver hacía dónde quieres ir responde a las preguntas:

¿Qué quiero lograr? META/OBJETIVO¿Cómo lo voy a lograr?
PROYECTO
¿Para qué lo quiero lograr? PROPÓSITO
   

3º Por último, haz una reflexión desde el sentido del camino que vas a comenzar o recomenzar:

  • ¿Es esta la meta que crees que te hará feliz?
  • ¿Cómo te gustaría verte dentro de cinco o diez años?
  • ¿Cómo cambiará tu vida si lo consigues?
  • ¿Qué hay detrás de esa meta? Es decir, ¿cuál es el propósito? La finalidad de tu plan de vida puede ser: obtener dinero, amor, libertad, tener más amigos o amigas, mejorar tu imagen personal, tener reconocimiento y fama.
  • ¿Crees de verdad que eso te hará feliz a largo plazo?

TODO COMIENZA EN TI

La respuesta que demos a esta pregunta ¿quién soy? será el principio, el comienzo hacia nuestra realización personal y emocional. No es una pregunta nueva, claro que no, pero lo que sí sabemos es que nunca es definitiva, porque jamás dejamos de crecer, cambiar y madurar como personas. El autoconocimiento lleva toda la vida y nunca dejamos de sorprendernos de lo que somos capaces de hacer, sentir, imaginar.

Nuestro punto de referencia para saber si vamos por el buen camino hacia la felicidad y realización personal es la fe que tenemos en nosotros mismos. La percepción de lo que valemos y lo que podemos, para tener una visión positiva de lo que somos, valemos y hacemos.

  1. Haz un autorretrato de tu forma de ser, comportarte, valorarte,
    vivir tu día a día en tus lugares habituales y con las personas
    con las que convives.
  2. Obsérvate desde fuera cuando te enfadas, cabreas, pierdes los
    nervios, etc. ¿Qué ves? ¿Te gustas? ¿Qué puedes hacer?

(«Cuando las emociones se hacen creativas» proyecto 1)

La gestión emocional comienza y se fundamenta en el autoconcepto, cuanto más nos conozcamos mejor

RECOMENZAMOS

Jamás comenzamos partiendo desde cero, siempre hay una experiencia previa y mucho aprendizaje. Por eso no comenzamos, recomenzamos, continuamos creciendo, caminando, avanzando y compartiendo todo lo que somos y tenemos. Lo importante es comenzar con un plan como parte esencial de que nos de la motivación necesaria para hacer proyecto con formación, preparación y entrenamiento para lograr nuestras metas, objetivos y querer mejorar. Comencemos nuestro proyecto personal con los siguientes pasos: Análisis de la situación actual desde la que partimos y las necesidades que tenemos, diseño de un programa de actuación, puesta en marcha y un buen plan de evaluación y seguimiento. ¿Comenzamos? Qué importante es hacerlo con un buen plan flexible, pero muy claro y concreto (Prácticas 2 «Más emociones creativas»)

MISIÓN, VISIÓN

Misión, visión, valores son necesarios para identificar nuestras
competencias emocionales y hacer posible un buen proyecto de
vida. Conocer las herramientas necesarias para construir nuestro
plan es parte esencial para conseguir alcanzar aquello que
soñamos. Necesitamos formación, preparación y entrenamiento
para lograr nuestras metas y objetivos y ser la mejor versión de
nosotros mismos. En todo comienzo necesitamos tener muy claro lo que necesitamos y lo que podemos hacer. Si con «Emociones creativas» lo hemos comenzado, «Más emociones creativas» nos hace profundizar y mejorar esas herramientas.

Todo aprendizaje tiene su parte emocional; busquemos las herramientas necesarias para lograr ser la mejor versión de nosotros mismos.

RECOMENZAR

Cuando comenzamos de nuevo, aunque sea con la misma actividad, es imprescindible marcarse metas y objetivos. Programar como una necesidad que nos permite la valoración y transformación del proceso desde su inicio hasta su consecución. La reflexión sobre lo que queremos y podemos hacer y finalmente la evaluación del mismo. Programar es decidir y explicitar el camino para lograr un objetivo.

Solo tenemos una vida por vivir, y solo tenemos una oportunidad para hacer las cosas que deseamos hacer. Comenzar de nuevo, una nueva etapa siempre es una oportunidad.

LA ILUSIÓN DEL PRINCIPIO

Todo comienzo tiene que ser un momento, no exento de miedos y nervios, de ilusión y esperanza, como un reto ante el camino que se nos presenta por delante. La ilusión es fundamental para que este camino sea el que queremos, aunque sea sólo como proceso hacía otro que nos facilitará alcanzar nuestras metas.

Comenzar con ilusión. Desear que todo nos vaya bien y consigamos nuestros objetivos