LA MAGIA DE CONECTAR CORAZONES

La empatía se podía definir como la capacidad que tiene una persona para ponerse en el lugar de otra. Es decir, para entender su situación y los sentimientos que está viviendo. Por eso, ser empático no es nada sencillo. Lo primero que tenemos que entender es que si yo no soy capaz de reconocer mis emociones, si no soy consciente de mis pensamientos, etc. difícilmente podré empatizar. La empatía es también una habilidad poderosa que nos permite construir relaciones más profundas, fomentar la conexión comunitaria y mejorar nuestro bienestar emocional. Para fortalecer esta habilidad, es importante practicar la escucha activa, reconocer las emociones propias y ajenas, ser tolerante y comprensivo, cultivar la empatía en todas las áreas de la vida y realizar actos de bondad y generosidad. Al hacerlo, podremos mejorar nuestra capacidad empática y contribuir a la creación de un mundo más tolerante y comprensivo.

Solemos ser , normalmente, simpáticos, compasivos…pero no empáticos. La empatía es como el arte de ser un explorador de sentimientos, ¡un aventurero de corazones! Implica ponerte en los zapatos de los demás, interpretando sus emociones, pensamientos y circunstancias. Después, conviertes esas pistas en acciones con el objetivo de lograr comprender al otro. Es como ser un guía que, desde la comprensión, acompaña a los demás. Porque la empatía supone el ponernos en la situación de la otra persona con el fin de comprenderla. Por eso, requiere que seamos muy respetuosos y tolerantes respetando las decisiones de los demás, aunque nosotros no hubiésemos tomado esas mismas decisiones. Se trata de apoyar, acompañar, respetar y comprender. Entender que cada persona somos diferentes y tenemos unas necesidades acordes a las circunstancias de cada uno.

¿Cómo es y actúa una persona empática?

  • Con el corazón y la mente siempre abiertos que le permite entender las emocionales que generan algunas situaciones en nuestra vida.
  • Entienden (aunque no tienen por que estar de acuerdo) el motivo que lleva a la otra persona a reaccionar tal y como lo hace, intentando comprender el verdadero motivo por lo que la otra persona se siente así, lo que está viviendo, etc.
  • Acompañan desde el corazón a las personas están experimentando un episodio difícil. complicado, injusto… y son capaces de vislumbrar lo que necesitan en ese momento.
  • Calman, sosiegan y acompañan. Rara vez aconsejan, porque saben que ellos no es tienen la solución.
  • Su empatía viene de sus propias experiencias vividas y sentidas a lo largo de su vida. Hablan desde lo que ya han sentido.
  • Son personas humildes y compasivas.

Una de las principales ventajas de practicar la empatía es que comprendemos las razones que hay detrás de ciertos comportamientos que a veces nos resultan desconcertantes. Al hacerlo, podemos percibir que la hostilidad, falta de interés, desgana… de algunas personas en realidad es miedo e inseguridad, y que la aparente fragilidad de otros revela humildad y timidez. Y es que, la empatía tiene el poder de transformar las relaciones humanas. Al mostrar un interés por los demás y comprender lo que sienten, se fomenta la confianza y el respeto mutuo. Esta cualidad brinda la posibilidad de crecer y aprender a nivel personal, que en la vida nos encontramos con diferentes perspectivas y vivencias que enriquecen nuestra visión del mundo.

En las relaciones interpersonales, es crucial distinguir entre ser empático y ser simpático. Ser empático implica comprender a fondo los sentimientos y perspectivas de los demás, mientras que ser simpático se refiere a ser amable y agradable. Aunque ambas cualidades son positivas en las relaciones, es fundamental encontrar un equilibrio entre ambas para establecer relaciones saludables y significativas. Esta armonía nos permite cultivar conexiones que fomentan nuestro crecimiento personal y desarrollo personal.

La empatía crea una sensación de cercanía con quienes nos rodean, fortaleciendo la confianza en relaciones personales y profesionales. Además, aporta credibilidad y bienestar. Aunque implica alejarse un poco de nosotros, es crucial empezar practicando la empatía hacia uno mismo, ya que a menudo descuidamos nuestras propias necesidades y nos enfrentamos al agotamiento emocional. Concluimos, los beneficios de cultivar la empatía son incalculables y recordemos que la empatía es esencial para construir un mundo en el que todos nos necesitamos.

El primer paso para la compasión es darse cuenta de la necesidad de otra persona. Todo comienza con el simple acto de atención. (Daniel Goleman)

PROPUESTA DE TRABAJO: Algunas ideas para ser un poco más empáticos.

  1. El primer paso para ser verdaderamente empático es entenderte a ti mismo. Intenta entenderte, conocerte y ser empático, primero contigo mismo, con tus propios sentimientos, pensamientos y acciones.
  2. Lo segundo, vive sin prejuicios. Esto te facilitará el poder ser respetuoso, tolerante y no juzgan a los demás. Porque aunque no estés de acuerdo con las decisiones de los otros, tienes que entenderles y tomar distancia.
  3. Te propongo un ejercicio muy práctico para vivir los pasos anteriores. Recuerda un problema de alguien cercano a ti y lo escribes en un papel. Ahora haz este mismo ejercicio como si fuera tu problema. Finalmente, vuelve a redactarlo pero sabiendo que el problema es el otro. Podríamos llamar a este ejercicio: “Yo” tengo “tu” problema. Relee los tres textos ¿Qué ha sucedido? ¿Qué notas? ¿Cómo te sientes?
  4. Para saber más ENLACE

EL PODER DE LA COMUNICACIÓN EMOCIONAL

Cuando hablamos, no solo lanzamos palabras al aire; también nos comunicamos y transmitimos emociones. La comunicación emocional es el arte de integrar nuestros sentimientos en el mensaje para lograr una conexión auténtica y efectiva. ¿Cómo aprender a comunicarnos emocionalmente?

¿Qué es la comunicación emocional? Imagina que nuestras palabras son flechas y las emociones, el arco que las impulsan. La comunicación emocional, la buena comunicación emocional, consiste no solo en hablar; sino en comunicarnos desde lo emocional para transmitir sentimientos a través de medios verbales y no verbales. Desde un cálido abrazo hasta una mirada significativa, cada gesto cuenta para expresarnos de forma afectiva. Este tipo de comunicación nos ayuda a convencer, emocionar, persuadir e incluso a ser comprendidos de tal forma, que con solo palabras sería muy difícil lograrlo.

Es fundamental compartir nuestras emociones para cuidar nuestra salud emocional y bienestar personal. La falta de expresión emocional dificulta la comunicación sincera con nosotros mismos y los demás. Al guardarnos nuestros sentimientos, experimentamos malestar generando una tensión interna por lo que callamos, pero que se percibe aunque no lo digamos. En contraste, al expresar nuestras emociones, podemos hacer lo necesario para actuar en consecuencia. Es importante que recordemos que nuestras emociones nos informan de necesidades no satisfechas que debemos abordar y una de ellas es expresar lo que sentimos.

Características clave para una buena comunicación emocional:

1. Subjetividad en el mensaje: Transmitiendo el mensaje desde una perspectiva subjetiva nos permite expresar y comprender las emociones de manera más profunda porque compartimos nuestra propia interpretación de las cosas, desde nuestra experiencia emocional.

2. Verbos emocionales: ¿Te encanta, te sorprende o te enfada? Utilizar verbos emocionales como estos enriquece nuestra comunicación, porque compartimos nuestros afectos, sentimientos y necesidades.

3. Estado de ánimo y autoestima: Nuestras emociones están vinculadas a nuestro estado de ánimo, autoestima, inseguridades y habilidades sociales. La manera en que nos comunicamos y nos expresamos, la forma en que lo hacemos, el momento en que lo decimos y nuestra expresión son elementos clave para lograr una comunicación eficaz.

4. Descripción de sentimientos: En lugar de etiquetar a las personas, describimos cómo nos hacen sentir sus acciones, buscando siempre una comprensión mutua. Nadie es adivino y, por eso, tenemos que comunicar lo que sentimos ante diferentes comportamientos, ya sean positivos o negativos.

La comunicación emocional es una habilidad esencial dentro de la Inteligencia Emocional y como tal tenemos que trabajarla a diario siendo conscientes de cómo nos comunicamos y expresamos. La comunicación es verdaderamente emocional cuando tenemos en se hace desde el respeto hacia la persona receptora del mensaje, reconociendo sus propias ideas, opiniones y características distintas a las nuestras. Por tanto, para lograr una conexión desde lo emocional, es crucial tener empatía pero expresando claramente como nos sentimos, sin miedo a ser juzgados y sin juzgar, sin malentendidos, siendo nosotros mismos…saber reconocerse en la otra persona. Potenciando una comunicación en la que la comprensión, cercanía y sensibilidad, estén presentes.

Y es que cuando desarrollamos una sólida inteligencia emocional nos brinda herramientas efectivas para identificar, gestionar y comunicar nuestras emociones de forma asertiva. Las emociones no solo se adaptan a las circunstancias externas, sino que también impulsan y guían nuestra conducta y comunicación.

La comunicación emocional es la clave para establecer conexiones auténticas y comprender mejor a los demás. No se trata solo de hablar, sino de compartir una parte de nosotros mismos. La comunicación afectiva, un enigma intrigante. Al hablar, nos juzgan; al callar, nos critican. Repetimos una y otra vez las cosas, pero parece que las palabras se las lleva el viento. Es como estar en una isla de confusión. Intentamos explicarnos incluso con gestos, ¡pero aún así no nos entienden! Así que la próxima vez que estemos en una conversación, recordemos: que las emociones son nuestras mejores aliadas para expresarnos y comunicar efectivamente.

¡Empieza a comunicarte emocionalmente y observa cómo tu vida y tus relaciones mejoran!

Mejorar nuestras habilidades comunicativas desde lo emocional tiene un impacto positivo tanto en nuestras relaciones como en lo personal.

PROPUESTA DE TRABAJO: Cómo mejorar tu comunicación emocional. Algunos Tics:

1. Reflexiona siempre antes de hablar. Piensa antes de abrir la boca o de hacer un gesto. ¿Cómo? Identifica tus emociones y enfoca el mensaje antes de abrir la boca, te ayudará a ser más claro y efectivo. Pasar la emoción por el pensamiento y el pensamiento por lo emocional.

2. El contacto visual. Los ojos son las ventanas del alma. Usa el contacto visual no solo para transmitir tus emociones, sino también para percibir las de los demás. Una mirada desde el corazón lo cambia todo ¡Qué distinto se ve el mundo con una mirada desde el corazón!

3. Gestión emocional también en la comunicación verbal y no verbal. Acepta y maneja tus emociones sin culpar a los demás. Aprende a no dejarte llevar por las emociones perturbadoras y aprende a gestionarlas con naturalidad. Expresa lo que sientes con asertividad y amor.

4. Comunica lo que sientes con respeto y empatía. Respeta a tus interlocutores y crea un ambiente cómodo y seguro. Evita juzgar sus sentimientos y acepta sus distintas formas de sentir, pensar y actuar. Cambia y busca otras perspectivas.

5. Participación activa. Involucra a todos los participantes en la conversación. La comunicación debe ser fluida y recíproca. No acapares todo el tiempo y aprende a escuchar, también con el corazón.

6. Usa verbos emocionales. Emplea verbos que hablen de emociones para comunicarte de manera afectiva y enriquecer tus conversaciones. Porque el el buen uso de verbos emocionales no solo mejora nuestras relaciones, además, puede cambiar nuestro comportamiento. Los verbos emocionales mas importantes podrían ser: creer, sentir, pensar, opinar y parecer. Una buena comunicación emocional nos cambia, mejora y hace mejores personas que no juzgan ni describen personas, sino comportamientos.

Para seguir trabajando ENLACE

¿SOY LO QUIÉN SOY?

El autoconocimiento es el primer pilar y la base de toda nuestra vida personal y emocional. Cuando hablamos de autoconocimiento nos referimos a saber interpretar adecuadamente y reconocer lo que somos, pensamos, sentimos y vivimos para avanzar hacia el pleno desarrollo como personas. El autoconocimiento lo podemos encontrar con distintos aspectos: la autopercepción, la autoobservación, la autoestima y la autoaceptación o autoconcepto. En definitiva es saber identificar, aceptar y comprender quiénes somos y quiénes queremos ser. La buena noticia es que es posible cambiar, mejorar, avanzar…y cuanto más nos conozcamos más sencillo se hará este proceso.

Conocernos bien para regular nuestras emociones, a tomar decisiones desde la realidad de manera más clara y eficaz, a ser conscientes de nuestras limitantes y potenciar nuestras competencias y habilidades. Desde el autoconocimiento, nuestras relaciones interpersonales mejoran y nos facilita la comunicación eficaz.

Buscar la mejor versión de nosotros mismos, desde el amor y el afecto, nos permite encontrarnos con la persona más importante de nuestra vida: Esa persona eres tú mismo.

PROPUESTA DE TRABAJO: Trabajar el autoconocimiento desde la visión que los demás tienen de nosotros.

1. ¿Me conoces? esta actividad está pensada para realizarla con grupos o personas que se conozcan desde tiempo. En grupos de 4 ó 5 pedimos que cada uno se describa de forma sencilla (Con adjetivos) y sin censurarnos. Dedicamos un tiempo en silencio.

Empezamos dando el tiempo suficiente para que cada uno escriba en su hoja los nombres de los miembros de su grupo y junto a cada nombre deberá poner cómo cree que es cada uno de sus compañeros.

Una vez el grupo haya terminado de describir a sus compañeros, cada uno empezará diciendo, primero, su opinión sobre sí mismo:

“Yo creo que soy muy hablador”

Una vez descrito cada uno, comenzará el resto del grupo a decir lo que piensa de él. La persona que recibe estas respuestas las anota en su hoja hasta que todos los del grupo hayan expresado lo que piensan de los demás y escuchado lo que piensan todos de él. Ahora, en esa lista y con su propia definición, completará su «hoja de autoconocimiento» del siguiente modo, siguiendo las definiciones de los demás:

“Yo creo que soy muy hablador…pero sé escuchar cuando es necesario”

Se finaliza la dinámica en el gran grupo comentando qué han sentido durante la descripción de sus compañeros y si se han visto identificados con las definiciones. Este ejercicio sirve para contrastar la imagen propia con la que ven los demás de nosotros mismos, aunque se debe ir con cuidado y asegurarse de que el ejercicio se va a hacer en el grupo con total respeto y siempre pensando en el otro. Por eso, tenemos que hacer un compromiso antes de comenzar para que nadie se ofenda o sienta mal.

Para profundizar ENLACE

EMPATÍA O SIMPATÍA

Normalmente confundimos en nuestras relaciones cotidianas la empatía con la simpatía porque buscamos caer bien, agradar y creemos que estamos empatizando, cuando en realidad es pura simpatía para lograr la aprobación del otro. ¿Entonces qué es la empatía? Es algo mucho m´ças profundo, supone respetar por encima de todo al otro, comprender que todo el mundo es libre de decidir cómo vivir su vida, sus ideas y acciones, que podemos estar o no de acuerdo. Ser empático es saber respetar al otro sin querer cambiarlo y conectar con la otra persona desde lo profundo para darle la oportunidad de expresarse tal y como es y se siente. Es escuchar, observar y respetar, en este orden, es el camino para la empatía.

Para ser empáticos debemos comenzar aprendiendo a escuchar y comprender los sentimientos del otro sin estar tan pendiente de nosotros mismos y de nuestras propias palabras, es decir, siendo conscientes de lo qué viven emocionalmente los demás, evitaremos muchos malos entendidos y ayudaremos más. Pero siempre comenzando por nosotros mismos.

¿Cómo lo haremos? Con la técnica de la entrevista. Si lo haces personalmente tienes que buscar a alguien para realizar la actividad, pero si lo haces en grupo, equipo o en clase, lo divides por parejas.

TAREA: Se trata de, por parejas, hacer una entrevista a modo de periodista de investigación.

1º Se hacen las parejas y se les entrega el dossier con las preguntas que se deben hacer. Primero uno y luego el otro.

2º Cada pareja busca un espacio para realizar la entrevista. Primero nos saludamos cordialmente y comenzamos la ronda de preguntas y respuestas. Sugerencia: como estamos trabajando la empatía tenemos que buscar preguntas que impliquen cierto grado de complicidad e intimidad. Siempre pensando en el grupo (Edad, nivel de relación, etc.)

3º Una vez realizada la entrevista, cada uno preparará la presentación del otro desde la interpretación de las respuestas que ha obtenido de manera creativa y, eso sí, muy EMPÁTICA.

4º Hacemos las presentaciones (Si se ha hecho personalmente, la puedes enviar por Email o las RRSS a la persona que has entrevistado?

Cuando las emociones se hacen creativas (Bloque 4, prácticas 2)

Empatizar con alguien es simplemente lograr que esa persona se sienta comprendida

SABER DECIR

En Inteligencia emocional el autoconocimiento es la base y pilar de todo lo demás. Este saber de nosotros mismos nos facilita el conocer y reconocer las emociones propias y, desde esta experiencia personal, reconocer las de los demás. Trabajemos la asertividad desde la empatía, como se dice en la práctica 29 y trabajar para adquirir esta habilidad social que nos dará la posibilidad de ponernos en el lugar del otro antes de hablar o juzgar.

Debemos aprender a decir lo qué sentimos de forma clara y asertiva siempre que nos moleste el comportamiento de los demás