Un sueño deja de serlo cuando lo convertimos en proyecto, pero es necesario soñar con aquello que queremos lograr, vernos con la meta logrado y el objetivo cumplido. La ilusión por lograr aquello que soñamos se convierte en la motivación para acometer todo aquello que sea necesario para conseguir nuestro objetivo por muy dificultoso que sea. En las prácticas 31 tenemos la posibilidad de trabajar este tema.
Todos los sueños tienen sus riesgos, pero ¿Qué es una vida sin sueños? Soñemos mucho

Publicado por
Pedrolupi
Docente durante más de 30 años y hoy mentor en inteligencia emocional y formador vivencial. Tras vivir la desmotivación y la desconexión en primera persona, descubrí que el verdadero cambio empieza desde dentro: parar, mirarse y reconectar con el propósito de vida. Acompaño a personas, equipos e instituciones a recuperar energía, equilibrio y sentido de vida, con un estilo cercano, práctico y con humor, porque el autocuidado y la motivación no pueden quedarse en teoría: se viven.
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