ESTO ES COSA DE SENTIDO DEL HUMOR

Cuando miramos la vida y a nosotros mismos con esa ilusión y alegría que brota desde dentro y que nos hace estar de buen humor, todo fluye y parece que las cosas nos salen mejor, pensamos con más claridad e, incluso, encontramos soluciones a cosas que parecía que no lo tenían. La herramienta más importante con la que contamos es la risa para aumentar nuestro humor. Tenemos que reírnos mucho para no dejar que muchas cosas nos pongan de mal humor. La risa y el buen humor serán nuestros grandes aliados para que, cuando finalice nuestra jornada, podamos decir que ha sido un día increíble. Será ese punto de alegría el que lo hará posible y, sin mucho esfuerzo, mejorará nuestro estado de ánimo, nuestra vida.

Una dosis de buen humor es clave para gestionar bien cada día, porque de todos es sabido que lo importante no son los problemas en sí que van surgiendo, sino el cómo los encajamos. Por eso yo siempre animo a escribir el diario de sentimientos donde plasmar todo lo que sentimos, pensamos y vivimos en nuestro día a día. El diario también nos ayuda a desahogarnos y trasformar nuestros fracasos y errores en verdaderas oportunidades que nos animen a seguir adelante. Siempre con buen humor. Reconocerse en nuestro caminar diario y ver las actitudes con las que nos enfrentamos para ser conscientes de su me tomo las circunstancias y la vida con sentido del humor, con una sonrisa e incluso con la seguridad que no solución nada amargándome, que lo del «al mal tiempo buena cara» no es solo un refrán, es una forma de vivir.

Qué distinto se ve el mundo, la vida y a nosotros mismos con sentido del humor. ¿Hacemos la prueba? Hay que aprender a reírse hasta de nuestra propia sombra.

Debemos trabajar cada día para mejorar nuestro humor e iluminar el mundo con nuestra sonrisa.

PROPUESTA DE TRABAJO: Una serie de actividades para mejorar tu estado de ánimo con la ayuda del sentido del humor y la risa para realizar personalmente y llevarlo al grupo, equipo, clase…:

  1. Si quieres cambiar tu humor, solo tienes que permitirte reírte. Haz el cambio: ¡un mal pensamiento, por una risa! Esta actividad te ayudará a cambiar el rollo negativo, pesimista y oscuro de tu vida. Practica, practica, practica todos o cada uno de las siguientes propuestas para mejorar y estado emocional desde el buen humor:
  • Imprímete una hoja llena de emoticonos de una cara feliz y sonriente. Recórtalos y cada pensamiento negativo o triste que aparezca, coge uno y sonríe.
  • Recuerda algún momento feliz, aquel en que no parabas de reír. Si tienes Whatsapp, Facebook, Instagram, etc., mira las fotos en las que estás feliz, divirtiéndote y sonriendo. Son los momentos divertidos que te ayudarán a sentirte mejor y darte ese punto de alegría que necesitas. Sonríe. y recuerda cómo estabas y qué estabas haciendo. Qué pensabas, qué sentías … sonríe
  • Jamás justifiques tu mal humor y si es otra persona la que te lo provoca, menos todavía. No merece la pena amargarse por algo o alguien. Sonríe.
  • Envía un mensaje, llama a alguien y, si es posible, hazte un selfi divertido y envíalo a alguna persona que sabes que sonreirá. Piensa en su reacción y sonríe.
  • Haz una lista, aunque sea mentalmente, de todo lo bueno que te ha sucedido y verás cómo es más lo bueno y agradable que lo malo y sonríe.
  • El mal humor surge por cosas “de antes” o “de después”. Pues vive, disfruta plenamente el presente: respira profundamente, ponte perfume, baila, canta, escucha tu música, sal a caminar, come algo que te apasiona, llama a alguien y dile lo que lo quieres, etc. Vive ahora y sonríe.
  • Puedes buscar más y mejores cosas: ofrécete a alguien para ayudarle, hacerle compañía, una tarea, etc. El dar tu tiempo y compartir tus habilidades mejora tu estado de ánimo y alegras la vida a los demás. Por eso, sonríe.

2. Se trata de dos actividades en una, pero las puedes adaptar a las circunstancias o realidad en la que las vas a trabajar.

  • Cantar. Te ayudará a segregar endorfinas que, en grandes cantidades, te ayudarán a sentir bienestar o placer. De acuerdo con el psicólogo, Arturo Torres, tiene múltiples beneficios: mejora la respiración, la postura, el sistema cardiovascular, a prevenir la demencia, bueno, hasta tonifica el abdomen. Pues ya sabes, ¡a cantar!
  • Bailar. Es el lenguaje más universal que existe, y es que no se necesitan palabras para expresar emociones. Deja que tu cuerpo se exprese, pon la música que más te guste y déjate llevar, muévete e improvisa. Bailar nos cambia nuestro estado de ánimo, disminuye el estrés porque aumenta los niveles de serotonina y, además, aumenta la inteligencia y previene el envejecimiento cerebral. Pues ¡a bailar! recuerda hacerlo con una gran sonría.
  • Lo ideal es combinar las dos actividades canta y baila. ¡Menudo subidón!

3. La tercera actividad es muy divertida y creativa. la llamaremos «Doblando» Con videos de YouTube o grabados por nosotros mismos a los que les quitamos el sonido. Los visualizamos e inventamos los diálogos, las letras o los comentarios, simplemente con lo que vemos. El resultado es increíble y si lo haces como una competición de varios grupos, mucho más. Verás que muchas veces mejora nuestro doblaje al original. Diviértete mucho con esta actividad.

COMPARTE

CON UNA BUENA ACTITUD

En el momento que somos conscientes que todo lo que nos sucede depende de nosotros mismos y que de lo que no depende de nosotros no podemos hacer nada o casi nada, comenzamos a liderar nuestra vida, no solo a gestionarla y nos centramos en lo verdaderamente importante. ¿Qué depende de mi? Tenemos que hacernos esta pregunta cada vez que nos veamos desbordados por alguna situación complicada y ser en todo momento nosotros mismos dando valor a nuestra vida y a nuestras posibilidades. ¿Cómo se logra? con actitud positiva realista para decidir qué podemos hacer y qué es lo que necesitamos.

La buena actitud comienza con la gestión, y no control, de nuestras emociones y pensamientos negativos, que tienen mucho que ver con la actitud con la que aceptamos o nos enfrentamos a la realidad que vivimos, a esta nueva realidad. Adoptar una buena actitud desde lo positivo, constructiva y productiva, vivir intensamente, disfrutando y saboreando cada momento, nos hará vivir de otra forma. Dice Marcel Proust que “aunque nada cambie, si yo cambio, todo cambia”. Ahí está la cuestión, en la actitud con la que vivimos nuestras vidas.

Movilizarnos y buscar nuevas oportunidades y experiencias para crecer. Las ganas, el deseo, la actitud por trasformar lo que hacemos es la forma de aprender a dirigir nuestra vida en el presente orientándola hacía el futuro. Contamos con un potencial, unas habilidades increíbles y muchos conocimientos, pero sino tenemos la actitud positiva para ponerlo en práctica no lo haremos jamás o será a medio gas, sin mucha fuerza, flojito y sin sabor. No nos merecemos una vida mediocre que nos desmotive y apague, nuestra automotivación en la vida debe ser hacer que todo lo que somos de valiosos lo pongamos en práctica para cambiar el mundo con pasión y entregándonos al máximo a nuestra misión en la vida, porque sabiendo cual es nuestra misión, podremos aportar al mundo lo mejor de nosotros mismos, dar valor a lo que es realmente importante y a las personas que nos valoran y quieren.

PROPUESTA DE TRABAJO: Dos actividades que te ayuden a buscar lo positivo, a que cambies de actitud frente a la vida, el mundo y tú mismo. La segunda es para dedicarle mucho tiempo, se trata de adquirir hábitos que te permitan afrontar la vida con otra actitud.

  1. Con esta actividad de autocompletar las frases tienes que ser capaz de descubrir lo que eres y tienes, lo que das y aportas al mundo, el cuál no sería lo mismo sin ti.

Puedo hacer una llamada, mandar un wasap, etc. a alguien…

Puedo parar un momento y respirar para ser consciente de…

Puedo caminar, dar un paseo solamente por…

Puedo comer algo sano para…

Puedo aceptar esa invitación de…

Puedo decir no a…

Puedo mejorar…

Puedo reflexionar y decidir…

Puedo…

¿A qué conclusión has llegado con esta actividad? ¿Qué has descubierto?

Te invito a que seas consciente que la voz que te dice que no puedes, no sabes, no eres capaz… no eres tú. En el momento en el que eres consciente de esto todo es más fácil. Recuerda que la solución está en ti y en tus capacidades, que solamente puedes cambiar lo que depende de ti y con esta actividad que has hecho has dado un paso adelante ¿Verdad?

2. ¿Cómo puedo tener una actitud positiva? La respuesta a esta cuestión es muy sencilla, pero llevarlo a la práctica es más complicado porque eres tú quien tiene que modificar tu forma de pensar y con ello mejorar tu vida. Para lograrlo te propongo algunos recursos que te pueden facilitar esta labor y te ayudarán a ver el mundo con más optimismo. Te aconsejo que dediques a cada uno de los puntos mucho tiempo y un espacio importante de tu día a día. Sé constante y consciente de cómo avanzas en positividad y con qué actitud te enfrentas a las cosas.

  • Busca el lado positivo: En la mayoría de las situaciones se encuentran aspectos positivos y negativos, busca y enfócate en los aspectos positivos que puedan otorgarte soluciones y bienestar en el futuro. No te quedes atrapado/a en los aspectos negativos, dándoles vueltas sinfín, sin llegar a soluciones.
  • El lenguaje es muy importante ¿Qué te dices? ¿Qué dices?
  • Concéntrate en la solución: Ante una situación adversa, concéntrate en definir los pasos para hallar la solución. De esta manera te alejas de los pensamientos negativos y te lleva directamente a la acción constructiva. El cambio es siempre una oportunidad, tener claro esto nos hará tener una actitud totalmente diferente que nos facilitará avanzar, madurar, crecer…
  • Cultiva las emociones positivas: Para favorecer las emociones positivas realiza actividades que te provoquen alegría y satisfacción. Compartir un café con una amiga o un amigo, hacer deporte, jugar con tus hijos, etc.
  • Al final del día menciona 5 cosas que te hicieron feliz durante el día.
  • Expresa gratitud: La gratitud te libera inmediatamente de las emociones negativas. Agradece cada día por lo que has logrado y por lo que tienes. Agradece por las cosas no materiales y materiales que te hacen feliz, eso te ayudará a ir dejando de lado los pensamientos negativos y frustrantes.
  • Comparte tu generosidad: Comparte lo que puedas con los demás, incluso los gestos más pequeños pueden provocar un cambio importante en la perspectiva de los demás, lo que provocara en ti una sensación de valor y orgullo propio.
  • Ofrece tu ayuda a un/a colega del trabajo en alguna actividad. Pregunta cómo se siente a tus seres queridos y amigos y comparte tu tiempo con los demás.
    Visualiza tu éxito: Tu habilidad para visualizar o imaginar puede ser una herramienta muy útil para ser más positivo. Imaginarte consiguiendo lo que deseas hace que te sientas más seguro/a, más positivo/a y con mayor esperanza de lograrlo.
  • Cierra los ojos y piensa en un evento positivo que te haya ocurrido y siente las emociones positivas, cuando abras de nuevo los ojos mantén las emociones positivas para trabajar en tus deseos.
  • Rodéate de personas positivas: Así como los bostezos o la risa, las actitudes positivas y negativas tambien se transmiten. Por lo tanto, procura rodearte de personas positivas y alejarte de las personas muy negativas.
  • Sonríe: Nuestras expresiones son una manera de expresar nuestras emociones. De manera que mantener una sonrisa te ayudará a sentirte mejor puesto que libera endorfinas, las hormonas de la felicidad. Sonríe mucho y desde el primer momento del día.

¡Ahora estas en camino de ser una persona positiva! ¿Realmente quieres ser feliz? Pues entonces, agradece lo que eres, tienes, sabes y trabaja por lograr aquello que sueñas.

En la actitud está el truco para vencer nuestras emociones negativas, todo depende de ti.

COMPARTE

CAMINA EL PROYECTO EMOCIONES CREATIVAS

El trabajo con la emociones es indispensable en la educación, tanto para docentes como para alumnos.
SM en GALICIA, CANTABRIA Y LA RIOJA. Generando valor y acompañando al docente en su formación continua. Porque la educación nos mueve, la editorial SM acompaña al profesor en su día a día ofreciendo productos y soluciones adaptados a los retos y necesidades educativas actuales.

Comenzamos el curso con una agenda llena de formaciones. Esta semana, el lunes 5, acompañamos a un grupo de 120 profesores de religión en un Curso online sobre «La importancia de las emociones en el aula» impartido por Pedro Luis (Lupi) Picazo Gómez y una segunda parte el viernes 16 «Propuestas prácticas de trabajo emocional en Religión»

Lupi es Licenciado en Arte Dramático y en Ciencias Religiosas. Máster como coach educativo y experto en Inteligencia Emocional, tiene un trayectoria docente amplia e imparte charlas y cursos de formación a docentes. Con la editorial PPC tiene publicados tres libros que forman parte del proyecto #emocionescreativas. Se pueden adquirir en: https://lnkd.in/dxrgAEN

Iván Pérez del Río

Consultor especialista

COMPARTE

CON MUCHA RESILIENCIA

¿Qué nos sucede cuando pasamos malas rachas, cuando parece que todo nos sale mal o la situación nos desborda? ¿Qué hacemos ante la desesperación ante algunos acontecimientos imprevistos? O, dicho de otro modo, ¿cómo nos sentimos? Sentir lo que nos sucede es necesario y expresarlo, ser conscientes de nuestros sentimientos y ponerles nombre imprescindible, actuar acorde a las circunstancias desde la propia realidad, también, pero hay que sentir “bien”, sin resignación ni dramas; simplemente sentir y observar las consecuencias de lo que sentimos y los comportamientos a los que nos lleva. Siempre desde la tolerancia y la flexibilidad tener confianza en nuestras capacidades y fortalezas para gestionar estos sentimientos de forma acorde a la realidad. Se trata de ser resilientes y, sin perder la esperanza, buscar todas las oportunidades de esta experiencia y aprender, crecer y hacernos más fuertes, levantarnos con más fuerza de nuestras caídas.

La resiliencia es el arte de navegar en los torrentes, el arte de metamorfosear el dolor para darle sentido; la capacidad de ser feliz incluso cuando tienes heridas en el alma.

Boris Cyrulnik

La negatividad como tal no es mala, es necesaria en algunos momentos de nuestra vida. Aunque en estos momentos veamos todo muy negro y triste, es normal, el problema es ser negativos por costumbre, esto nos hace encerrarnos en nosotros mismos y perder la correcta visión de la vida, de las circunstancias y de lo que somos. La negatividad nos hace egoístas, pasivos y miedosos transmitiendo emociones negativas a los demás.

Tenemos la obligación de hacer mejor la vida de los demás, y digo obligación porque es la única manera que tenemos de vivir circunstancias adversas, transmitiendo positividad, alegría, fuerza, ganas de vivir a los que nos rodean. Observamos a nuestro alrededor a muchas personas que necesitan un empuje a su vida, una dosis de energía y vitalidad para seguir adelante, y ahí es donde entramos nosotros.

El identificar la circunstancia, el hecho o la situación adversa para afrontar las adversidades, es el primer paso para aprender a enfrentarlo. Es ver la vida con objetividad, pero siempre a través de un prisma optimista

La buena noticia es que la resiliencia es una capacidad que puede aprenderse. En situaciones muy difíciles crece la incertidumbre, el miedo, el desconocimiento, la desesperanza y puede llegar a generarnos sentimientos de miedo, ansiedad, dolor, frustración… que no sabemos cómo gestionar. Recordemos que no podemos controlar lo que ocurre pero sí la manera de afrontarlo, porque las cosas suceden sin pedirnos permiso y es entonces cuando tenemos que tomar la decisión de verlo como algo terrible y del que no saldremos o como un reto, una oportunidad.

Cuando la realidad cambia en contra de la voluntad, tenemos que ser los protagonistas de manera consciente del cambio contando con lo que somos y tenemos, siendo muy agradecidos incluso en los momentos de dolor, dando gracias a la vida. No temer al cambio ni a las crisis, porque en otras ocasiones hemos salido de situaciones complicadas y esta puede ser una nueva oportunidad de crecer y aprender.

PROPUESTA DE TRABAJO:

1º La primera propuesta es un juego de continuar la frase como si alguien nos lo preguntara. Desde la capacidad que tenemos de observar y observarse al mismo tiempo y expresarlo. Ponte límites de entre lo que te causa el malestar o te hace vivir emocionalmente de manera negativa y pesimista y tu propia vida. ¿Hasta dónde puedo o tengo que “aguantar” este situación?

«Dime cómo te sientes…» 

Continúa la frase solamente con un sentimiento. Lo piensas un instante y responde ¿Por qué lo siento? ¿Para qué lo siento? ¿Cómo me afecta? ¿Cómo afecta a los demás? ¿Hasta cuándo estoy dispuesto a sentir esto? y lo expresamos con nuestras palabras verbal o por escrito. Lo repites otra vez «Dime cómo te sientes…» con otro sentimiento, así las veces que quieras o necesites. Al final responde ¿Qué puedo hacer? ¿Qué necesito? Aquí está el secreto para ir creciendo en resiliencia.

Si lo haces en grupo, se tiene que guardar turno y expresar el cómo nos sentimos para que los demás lo pueden escuchar. Vamos preguntando uno a otro en el orden que propongamos: «Dime cómo te sientes…» y el otro responde, sin explicación, simplemente lo dice. El resto no juzgamos, ni opinamos, simplemente escuchamos…después de una ronda o dos, hacemos un momento de puesta en común para comentar el cómo nos hemos sentido realizando esta actividad y ofreciéndoles a los demás nuestra comprensión y cercanía. Si los sentimientos son positivos dar las gracias y si son negativos buscar lo que nos pide que hagamos o dejemos de hacer.

Se pueden buscar tantas variantes como nuestra creatividad nos inspire.

2º Comienza interiorizando esta expresión: «Si crees que puedes puedes»

Tenemos que poner a trabajar todas nuestras capacidades, habilidades, talentos y recursos personales para vivir cualquier experiencia complicada y dura de manera positiva y compartir con los otros lo que soy y tengo. En esta actividad es muy importante trabajar el autoconocimiento. Aprende a quererte, jamás te juzgues, lo negativo es la situación, no eres tú, vigila lo qué te dices a ti mismo ante los problemas o dificultades de la vida y comprueba que eres muy valioso, identifícate con tus fortalezas.

CAPACIDADESHABILIDADESTALENTOSRECURSOS
          

Confía en todo lo que eres, haces, sabes y tienes, dedica un tiempo a pensar el qué puedes hacer para alegrarte, motivarte, ilusionarte, animarte … primero a ti mismo y, después, a los demás, porque una persona resiliente es muy generosa. ¿Qué podría hacer para estar mejor? ¿Qué podría hacer para hacer que los demás estén mejor?

Si lo trabajas en grupo decidimos una fecha y una hora para hacer un «festival de emociones» donde cada uno presentará a los demás su habilidad para superar momentos complicados. Se puede hacer a modo de concurso «Got talent» para hacerlo más divertido.

Con sentido del humor:

El sentido del humor es uno de los recursos más valiosos con los que contamos para afrontar cualquier adversidad. Tienes la opción de vivir lo que te sucede como víctima o protagonista, tú decides y en esta todo de decisión el humor tiene mucho que decir. No se trata de quitar importancia a lo que te está ocasionando el sufrimiento o la desesperación, se trata de vivirlo desde otra perspectiva, desde lo positivo siendo realistas y esto se logra con el sentido del humor, porque a pesar de las dificultades, el humor nos abre la mente para encarar las crisis desde otro punto de vista.

  • Cada vez que tengas uno de esos momentos y te vengan malos pensamientos, lo cambias por una sonrisa, verás cómo te ayudará a cambiar el rollo negativo, pesimista y oscuro de la vida. En clase, en el grupo o personalmente ríe a carcajadas. Notarás el cambio.
  • Dale la vuelta a la situación complicada y transformándola en una película de humor, observa cómo cambian los sentimientos, pero no la historia ¿Qué le sucede al argumento de la película de la vida si la vemos desde el sentido del humor? Haz la prueba y verás que te abre hacia nuevos caminos que antes ni te podías imaginar.
  • Practica el humor de manera consciente comenzando por reírte de ti mismo, siempre con mucho respeto a quién eres, pero sin dejarte influir por tus miedos. No como mecanismo de defensa, sino como una estrategia que nos librea de tensión y estrés ante la situación.Te invito a ponerte delante del espejo y practicar tu risa:
  • Ríete como si la risa saliera de tu garganta…
  • Ríe con ganas…
  • Ríe sin abrir la boca…
  • Ríe con las 5 vocales por turno…
  • Ríe mirándote a los ojos…
  • Ríe…

¿Qué sientes? ¿Cómo te sientes? Autoimponte la tarea de reír mucho durante el día. Piensa que la resiliencia se entrena y cuando llegue el momento sabrás reír incluso ante la dificultad.

Aprender a superar las dificultades de la vida expresando lo que sentimos, compartiendo nuestros dones y siento con otros nos hace más resilientes

COMPARTE

LA NUEVA REALIDAD EMOCIONAL

La educación o es emocional o no lo es

Rosa Casafont

Un diálogo en el encuentro con grandes personas de España y Latinoamérica que nos preocupa en estos momentos la educación en la escuela, la familia, la sociedad… Educadores que afrontemos el desafío socioemocional de este momento histórico que estamos viviendo.

El proyecto «Emociones creativas» aporta su propuesta para trabajar lo emocional desde la experiencia del educador y que lo pueda llevar al ámbito que necesite.

COMPARTE

¿QUIÉN SOY YO?

La base de una sana inteligencia emocional y por ende de una vida feliz comienza con un buen autoconcepto, siempre real y en positivo.

Todo empieza conociéndonos a nosotros mismos. Es “el principio de toda sabiduría” como dijo Aristóteles hace más de 2000 años. Nuestra responsabilidad es conocernos para descubrir y valorar nuestra identidad personal, para responder a la pregunta ¿quién soy?. Cuando somos conscientes de nuestro YO profundo, de lo que nos hace ser nosotros mismos, lo que nos diferencia de los demás y nos hace únicos e irrepetibles podemos decir que sabemos quienes somos. Con la teoría de la autodiscrepancia (Higgins, 1987) se nos proponen tres formas de vernos. La real, tal y como nos conocemos y nos han hecho creer que somos. La ideal, esa persona que nos gustaría ser. Y, por último, nuestro yo responsable que nos dice cómo deberíamos ser. La tarea es la de conocernos, reconocernos y valorarnos teniendo en cuenta estas tres visiones de nosotros mismos para responder a la pregunta ¿Quién soy? La respuesta será personal desde la vivencia que tenemos de nosotros mismos, con nosotros mismos y en relación con lo que nos rodea. Ser conscientes de lo que pensamos de nosotros mismos, nuestros hábitos, sentimientos, de cómo nos juzgamos, de lo que somos, de cómo somos y de lo que valemos, soñamos y amamos.

Conocernos para aprender la infinidad de cualidades y habilidades con las que contamos y que hemos ido adquiriendo a lo largo de nuestra vida, muchas de ellas no sabemos que las poseemos hasta que alguien nos lo dice o hacemos el ejercicio de autoconocimiento, por eso es urgente que dediquemos un espacio y un tiempo para ese encuentro personal con nosotros mismos. El siguiente paso después de conocernos es valorarnos y confiar en nosotros. Nuestro SER profundo, nuestra identidad es lo que realmente nos DEFINE como personas. Cuando asumimos quiénes somos y somos conscientes de nuestro YO podremos tomar la decisión de potenciar aquello que nos hace mejores y mejorar lo que no nos gusta.

PROPUESTA DE TRABAJO te propongo algunas actividades para trabajar tu autoconcepto que te ayuden a descubrir tu identidad. Dedica un tiempo a nosotros mismos.

  1. Haz una reflexión de cómo estás de amor propio y ajeno. Si te sientes querido y si te respetas y quieres a ti mismo. Te pueden ayudar de estas cuestiones:
  • ¿Qué te hace especial y auténtico?
  • ¿Cómo sientes el amor? (Comenzando por ti mismo)
  • ¿Te respetas, cuidas, mimas, etc.?
  • ¿Amas desde lo que sientes y eres? ¿Qué haces para amarte?

2. Esta segunda propuesta se trata de hacer una revisión de cómo andas de autoconocimiento. Haz una radiografía de lo que eres y piensas de ti desde diferentes aspectos de la misma. ¿Te atreves?
Físicamente: ¿Qué opinas de tu salud, aspecto, cuidado, etc.? Puntúate del 1 al 10 y explícalo.
Emocionalmente: ¿Qué opinas de las emociones que predominan en tu vida?¿Las aceptas y gestionas adecuadamente? Puntúate del 1 al 10 y explícalo.
Mentalmente: ¿Qué opinas de tus pensamientos, creencias, miedos, etc.? Puntúate de la misma manera.
Si estás por debajo del 7 en alguno de estos aspectos, debes mejorar tu autoconcepto y preguntarte: ¿Qué necesitas para mejorarlo?¿Qué puedes hacer?

3. Dinámica “Espejito, espejito”
Después de un rato de silencio, relajación y concentración. Respira profundamente y mirándonos en un espajo o en la pantalla del móvil vamos respondiendo a las preguntas:

  • ¿Qué piensas de lo que ves?
  • ¿Qué te dices?
  • ¿Qué haces?
  • ¿Qué elijes?
  • ¿Qué tal estás de amor a ti mismo?
  • ¿Qué quieres cambiar?
  • ¿Qué podrías hacer para mejorar?

CONCLUSIÓN: Termina estas actividades respondiendo a la pregunta ¿Quién soy? Defínete.

COMPARTE

ESTAR EN SALIDA

Es un estado de vida, es no acomodarse en la zona de confort, es crecer con experiencia, esto significa estar en salida. Nos acostumbramos a estar y ser de un modo concreto, nos acomodamos incluso a lo que nos hace daño o simplemente no nos hace lo felices que deberíamos ser y no somos capaces de ver más allá de nuestra propia mediocridad o rutina estéril. Debemos ponernos en acción y cambiar las preguntas de nuestra vida los“tengo que hacer…”por los “quiero hacer…”¿Por qué hacer siempre las mismas cosas si no nos funcionan o no nos aportan nada? Con una buena inteligencia emocional es muy difícil que nos instalemos en esa zona de falsa seguridad en la que todo es aparentemente tranquilo y bueno, una estabilidad que nos hace estáticos y muy poco creativos. Crecemos y maduramos saliendo de nuestra zona de confort porque al salir descubrimos un mundo lleno de oportunidades, conocimientos, experiencias, metas y sobre todo emociones que nos hacen estar vivos y disfrutando del presente.

Para sentirse vivo y presente es necesario salir de la zona de confort, de nuestra comodidad y ponernos en camino.

PROPUESTA DE TRABAJO

Haz lista de las cosas que tienes que hacer para salir de tu zona de confort, tantas como se te ocurran, son esas cosas que sabes que son necesarias para avanzar, crecer, aprender pero…

  • Tengo que…
  • Tengo que…
  • Tengo que…

Ahora, con la misma actividad que has dicho qué tienes que hacer, cambia el “tengo” por el “quiero”, sé consciente de lo que sientes cuando estés escribiendo los «quiero»

  • Quiero…
  • Quiero…
  • Quiero…

¿Qué ha sucedido? ¿Ves algún cambio? Saca tus propias conclusiones y responde a esta pregunta ¿Qué harías que no haces si cambias el tengo por el quiero?

Todo está en querer y ponerse en camino, en ACCIÓN, al principio será difícil, pero conforme vamos descubriendo que la zona de confort no desaparece, sino que crece, nuestra vida mejora y jamás dejamos de avanzar y hacemos muchísimas cosas que antes eran impensables. Por eso nuestra vida está siempre en continua SALIDA, buscar un nuevo sueño y trabajar para lograrlo y así ir convirtiéndonos en la mejor versión de nosotros mismos y hacer del mundo un lugar mejor.

COMPARTE

¿Y SI LOS SUEÑOS FUERAN METAS?

Todo lo importante de nuestra vida comienza con y por un sueño. Desde muy pequeños soñamos con lograr aquello que deseamos. Muchas veces se queda en eso, en un sueño, pero en otras ocasiones nos impulsa a trabajar para lograrlo y ponemos toda nuestra energía, ilusión, esfuerzo y capacidades. Un sueño deja de serlo cuando somos capaces de transformarlo en un proyecto basado en nuestras capacidades, habilidades y herramientas y vamos a por todas con ahínco y perseverancia, positividad e ilusión. No dejemos jamás de soñar y trabajar para que esos sueños se cumplan.

Pero ¿y si esos sueños los hacemos metas? Los sueños son la base de nuestras metas y de nuestro desarrollo personal, pero los sueños sin acción no llegarán por sí solos. En el preciso momento en el que decidamos que vamos a por un sueño, mente, cuerpo y sentimientos se pondrán en acción y, si no es así, no es nuestro sueño. Tener un sueño nos aporta la motivación necesaria para trabajar por el logro de lo que deseamos, es un verdadero impulsor emocional.

Los sueños son el motor que nos impulsa para hacer realidad lo que deseamos en la vida

PROPUESTA DE TRABAJO

  • Comienza esta actividad dejando a un lado tu ser más racional y busca lo creativo y original que tienes y eres.
  • Todo es cuestión de soñar. ¿Ya tienes un sueño? pues dedica un tiempo y un espacio para recordarlo, revivirlo y redactarlo. Si no lo tienes, sueña, sueña mucho y a lo grande.
  • Ahora, sé lo más creativo que puedas, sin forzar nada, simplemente déjate llevar. Dibuja un camino donde se vea muy claramente la salida y la meta. Tan largo como quieras, lo importante es que lo decores y personalices. Utiliza todas las técnicas que se te ocurran y disfruta mucho en el proceso creativo.
  • En la salida escribe o dibuja, o las dos cosas, tu situación actual, de la que partes, lo que llevas en la mochila como recursos para avanzar en el camino, con lo que cuentas: valores, habilidades, experiencias, ilusiones, etc.
    En la meta escribe o dibuja, o ambas, el sueño hacia al que te diriges.
  • Marca en el camino diversos momentos (acciones, objetivos a corto plazo, etc.) que te van a ayudar a avanzar o son necesarios para llegar a tu meta. En este punto aclaramos que se puede ir completando conforme vayamos haciendo el recorrido; logros, aprendizajes, dificultades, personas que nos vamos encontrando…porque el camino es VIDA.
  • Pon esta creación en un lugar visible y que te recuerde que estás en CAMINO.
  • ¿Qué te parece la idea? Cuando llegues a la meta es muy importante que tengas muy cerca este camino y veas que “todo sueño se puede hacer realidad si te pones en camino hacia la meta” cuentas con todo lo necesario para lograrlo, si no es así, lo busca lo que necesitas y si aun así no lo consigues, lo que hayas avanzado ya es un gran logro, y posiblemente ese sueño no era el tuyo.
COMPARTE