UN CAMINO EMOCIONANTE

El proyecto «Emociones creativas» está lleno de prácticas y actividades de inteligencia emocional para cualquier persona que desee aprender a vivir su ser emocional con inteligencia y naturalidad. Cada bloque concluye con un apunte de inteligencia espiritual que es y da la respuesta al sentido de lo que somos y tenemos ❤ Comenzar con el primer manual y familiarizarse con la estructura y metodología de trabajo, interiorizar todo lo experimentado y vivido para poderlo llevar a la vida. Continuar con «Más emociones creativas» y profundizar dando un paso más en nuestro crecimiento personal en inteligencia emocional y compartirlo. Por último, con «Cuando las emociones se hacen creativas» aplicaremos todo lo practicado e interiorizado con la ayuda de cuatro proyectos de manera personal o grupal, ideal para tutorías, catequesis o simplemente nuestros grupos de trabajo o vida.

Una persona emocionalmente inteligente, vive el ahora sin perder de vista lo que quiere ser y vivir en el futuro, pero saboreando cada momento, aprendiendo de las experiencias y creciendo con todos los acontecimientos de su vida.

«Más emociones creativas» Prácticas 1

SOMOS CUERPO

Hoy hemos comenzado las prácticas de inteligencia emocional y espiritual con alumnado de bachillerato dentro del proyecto»¿Quién soy?» Se trata de un recorrido por las cuatro dimensiones de la persona: corporal, mental, emocional y espiritual. En este caso la primera es nuestra dimensión corporal como es el primer paso para lograr ser felices. Reconocernos y valorarnos en nuestra dimensión corporal es algo imprescindible para adquirir una sana y equilibrada vida emocional. En las prácticas 11 de «Emociones creativas» encontramos algunas propuestas para practicar esta dimensión humana.

Puede que mis palabras mientan, pero mi cuerpo jamás lo hará

PRÁCTICAS EMOCIONALES

Si ya llevas varias prácticas del manual, te habrás dado cuenta que esto de la inteligencia emocional no algo teórico que se memorice y se lleve a la vida sin más. Te aconsejo que no leas el libro como si fuese de autoayuda, porque no lo es, sino como una herramienta de trabajo personal para adquirir las habilidades necesarias para conseguir los hábitos emocional adecuados para ser y estar mejor.

La inteligencia emocional no se aprende, se practica todos los días y en cada momento.

La inteligencia emocional requiere practicar, practicar, practicar